Por tercer mes consecutivo, las transferencias automáticas a provincias crecieron en términos reales, antes de que se sienta el impacto de la volatilidad financiera y cambiaria. Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), en agosto las jurisdicciones recibieron $5.127.000 millones por coparticipación, leyes especiales y compensaciones, un 2,4% más en términos reales que en igual mes de 2024.
En ese marco, la provincia de Santa Fe percibió $439.546 millones, lo que significó un incremento de apenas 0,7% interanual real. Fue la variación más baja entre las jurisdicciones, muy por debajo del promedio y de los 4,2% de crecimiento que registró la provincia de Buenos Aires, encabezada por Axel Kicillof. Córdoba quedó apenas por encima de Santa Fe, con 0,8%.
El informe destaca que la mejora se explica sobre todo por la recaudación del impuesto a las ganancias, que creció 11% en términos reales, mientras que el IVA apenas aumentó 0,4%. El cambio en el esquema de anticipos de sociedades también influyó, al postergar pagos de junio y concentrarlos en los meses siguientes.
En el acumulado de enero a agosto, las provincias y CABA recibieron $38,7 billones, un 4,1% más en términos reales que en el mismo período de 2024. Sin embargo, el escenario futuro se presenta incierto. “De cara a los próximos meses, la recaudación de Ganancias e IVA resulta crucial”, advirtió Nadin Argañaraz, director del Iaraf, en referencia a la desaceleración económica y el efecto de las altas tasas de interés.
El balance deja a Santa Fe en una posición incómoda: pese al repunte de la recaudación nacional, sus giros se ubicaron en el extremo inferior de la tabla, con menos margen para sostener el financiamiento provincial frente a la etapa de turbulencias que atraviesa la economía.