La temporada de mayor venta no se notó en 2025. El sector advierte por la pérdida de poder adquisitivo, el aumento de tarifas y la competencia clandestina.
Rosario, 2 de septiembre de 2025. Las panaderías de Rosario atravesaron un invierno con ventas en baja. Según la Asociación de Industriales Panaderos, el consumo cayó entre 10% y 15% en comparación con el año pasado, pese a que históricamente la temporada fría marca un repunte. El principal factor señalado es la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores.
Jeremías Diab, presidente de la entidad, explicó que los clientes priorizan el pan básico y dejan de lado productos de mayor valor como postres y masas finas. Ante esta retracción, los locales ajustan la producción día a día para evitar pérdidas. “Ya no se hornea de noche para reponer durante el día; lo que no tiene salida, se tira”, graficó.
El precio del kilo de pan ronda entre $2.800 y $3.000. El sector afirma que intentó contener los valores, pero el peso de las tarifas energéticas creció fuerte: la electricidad representa entre 10% y 15% de los costos fijos y en verano puede duplicarse. A esto se suma la presión salarial en un contexto de consumo estancado.
La compra de pan se sostiene, aunque con cambios de hábitos: menos volumen, más productos básicos y sin “gustos” adicionales. En paralelo, proliferan cafeterías con propuestas premium y, en el otro extremo, comercios clandestinos. La Asociación estima que en Rosario funcionan hasta un 50% más de locales sin habilitación que compiten con precios de $800 a $1.200 por kilo, sin controles bromatológicos.
El sector pidió mayores controles al Ministerio de Trabajo y al municipio, al tiempo que advierte que las fiestas de fin de año serán un alivio estacional, pero que el verano puede resultar muy difícil si no se revierte la tendencia.
